Aprendí a escribir en papel en blanco. Sin líneas, solamente una inútil hoja de papel blanco.

Tenía como 6 años. Mi maestra se llamaba Sonia.

Ella solía decir: “está bien si te vas chueca. Si practicas y practicas y practicas, escribirás derechita más rápido de lo que tú crees. Solamente imagina que hay una línea recta donde la necesitas”.

No recuerdo mucho más de aquél primer año de primaria. Pero me encanta escribir sobre una hoja de papel en blanco. Me siento muy libre.

Teclear puede ser mucho más rápido. Usar un lápiz electrónico sobre una tableta puede simular el escribir a mano. Sin embargo escribir con la mano es y seguirá siendo mi método favorito para sacar las emociones y pensamientos de mi mente y alma.

Inténtalo!

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